Por ese reloj de oro por fuera, y cobre por dentro, por esas manecillas que sólo el propio tiempo subsanará, tarde o temprano...
Empezando el día entre sábanas, con una taza de café esperando, el aroma de un buen desayuno recién levantado...las pequeñas cosas y las materiales no nos afectan de igual forma... y digo ésto porque muchas personas te enseñan a que lo material, importa bien poco y es tu tiempo, tu constancia, tu ilusión, tu perseverancia, determinación, esencia...todo lo que tú eres y lo que demuestras todos los días, eso es lo que reflejas en el espejo de otra persona que sólo conoce una de tus caras, pues tú mismo eres siempre un reflejo de tu realidad... Conocemos, hablamos, observamos, criticamos, alabamos, lo que otras personas hacen pero no estamos dispuestos a analizarnos nosotros mismos, lo que sentimos, somos, y queremos, en profundidad. Para ello, necesitamos creer que todo lo que poseemos en cuestión de tiempo se desvanecerá si no lo cuidamos...aquellos zapatos que una vez te regalaron por tu cumpleaños, aquél minuto que esa persona le dedicó a tí, y sólo a tí, porque quiso, porq...